martes, 9 de septiembre de 2008

INICIOS DE LA REPÚBLICA


Virreinato
El imperio español significó para el Perú una profunda transformación social y económica. Se implantó un sistema mercantilista, sostenido por la minería del oro y de la plata, el monopolio comercial y la explotación de la mano de obra indígena bajo una forma de mita.

A partir de fines del siglo XVI e inicios del XVII, el poder virreinal se vio lentamente socavado por el contrabando comercial y la insurgencia separatista, como el indígena Túpac Amaru II y posteriormente también criolla.

Independencia
San Martín proclama la Independencia del Perú el 28 de julio de 1821, el movimiento independentista dirigido por el general argentino José de San Martín, proveniente de Chile, declaró la independencia e instauró un nuevo estado: la República del Perú cuyo nombre lo consigna tácitamente el Acta de Independencia de este país. Sin embargo, recién en 1824 el general venezolano Simón Bolívar logró expulsar definitivamente las tropas realistas afincadas en la sierra sur tras las batallas de Junín y Ayacucho, el 6 de agosto y 9 de diciembre de 1824 respectivamente.

República

El caudillismo
Los primeros años de independencia se desarrollaron entre luchas caudillescas organizadas por los militares para alcanzar la Presidencia de la República.

La sociedad a inicios de la República

El cambio de virreinato a república era la oportunidad para los indígenas de convertirse en verdaderos ciudadanos, con iguales derechos que cualquier otro grupo que formaba parte del Perú.

El tributo colonial que los indígenas pagaron por más de 300 años fue eliminado, pero en su lugar se creó la contribución indígena, un cambio de nombre que en nada modificó el pago forzoso que debían hacer, esta vez al estado.

La población negra en el Perú se concentraba principalmente en la costa como mano de obra esclava en las haciendas algodoneras e ingenios azucareros. Con la llegada de la independencia hubo una disminución del régimen de esclavitud pues el General San Martín estableció la ley de vientres libres, en la que se establecía la libertad de todos los hijos de esclavos nacidos después de la declaración de independencia. Durante estas guerras muchos esclavos se enrolaron al ejército bajo el mando de sus amos, otros escapaban y lograban ingresar a algún batallón que los recibía. Por sus acciones destacadas muchos lograron obtener la libertad o insertarse a la vida urbana.

Lo cierto es que con los años la esclavitud ya no resultaba ser un negocio, entre otras razones, por la prohibición del comercio de negros por parte de la mayoría de países europeos. Resultaba más barato contratar mano de obra asalariada que mantener las cuadrillas de esclavos y sus familias. Es por ello que muchos años antes de que el Mariscal Castilla decretara la abolición de la esclavitud, gran número de negros eran trabajadores libres en las principales haciendas costeñas.